miércoles, 7 de mayo de 2014

CIUDAD AMANECIDA


 Logré perderme en la tempestad
bajo el sueño dormido de los pinos.
Inconclusos los párpados, niegan,
la cobardía de pretender salvarme.
Palabras exánimes,
fotografías sin rostro,
pintarán de amarillo mi frente.
Será el sol
de la ciudad amanecida,
la que poblará mi sueño
con el delirio de una rosa
y un clavel.

 

Mª Olga Vidal Vidal

(6-04-2014)

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